Hace unos meses, alguien me preguntó si podía ayudarlo a conseguir una entrevista para postularse para un puesto ejecutivo en una empresa millonaria. Como sabía que esta persona estaba altamente calificada y yo tenía una buena relación con la persona a cargo de la contratación, hice la llamada y pude establecer la entrevista. Aproximadamente una semana después, le pregunté a mi amigo si había contratado a la persona que le envié. Me dijo que le había dado el trabajo a una persona menos calificada y le pregunté, ¿por qué? Él me respondió, por la forma en que vino vestido para la entrevista. El que me enviaste, apareció vestido con pantalones cortos y una camiseta y es cierto que está altamente calificado, el problema es que solo quiere un trabajo, yo estoy buscando contratar a una persona que busque alcanzar el éxito, inclusive si está menos calificada.
LECTURA BIBLICA:
“Revístanse todos de humildad en su trato mutuo, porque Dios se opone a los orgullosos, pero da gracia a los humildes” 1 Pedro 5: 5 NVI.
La verdad es que la forma en que nos vestimos es importante, es una ventana a nuestra alma y refleja nuestros diferentes estados de ánimo y personalidad. Como seguidores de Jesús, el apóstol Pablo nos ordena que nos vistamos apropiadamente. Lo curioso es que no estaba hablando de nuestras vestimentas exteriores, estaba hablando de quiénes somos por dentro. La verdad es que, algunos seguidores de Jesús usan traje y corbata, pero cuando los conoces dejan mucho que desear. Otros se visten de manera moderna, utilizando marcas de diseñadores famosos y aunque obtengan una alta puntuación en la escala de estilo, nuevamente, después de conocerlos, dejan mucho que desear.
Como cristianos, una de las vestimentas que siempre debemos tener puesta es la humildad. Una persona vestida de humildad es la que valora a los demás y considera las necesidades e intereses de los demás incluso por encima de los suyos. Es la persona que se despierta todas las mañanas y se pregunta, ¿cómo puedo ayudar o bendecir a las personas con que interactúe hoy? Eso es más poderoso que cualquier traje y corbata y más poderoso que cualquier diseñador de nombre. Esto se debe a que Dios se opone a los orgullosos, a los que piensan en sí mismos, pero muestra favor a los humildes, a los que consideran y valoran las necesidades de los demás.
PIÉNSALO:
Lo que esté sucediendo en el interior de una persona se va a reflejar en el exterior, en la manera en que se expresa, actúa e incluso en su forma de vestir. Si quieres vestirte para obtener el éxito; disfrutar de la gracia de Dios y de sus bendiciones, entonces no olvides vestirte de humildad.
ORA:
Padre celestial ayúdame a comenzar mi día preguntándome cómo puedo ayudar y bendecir a las personas con las que voy a interactuar ese día, que mi actitud sea en todo momento de servir a otros y considerar las necesidades de ellos por encima de las mías, porque Tú Señor te opones a los orgullosos, pero le das gracia a los humildes. Gracias por mostrarme la importante de vestirme de humildad.